🎓 Las emprendedoras enarbolan el espíritu de colaboración

El emprendimiento impulsado por las mujeres tiene ante sí el reto de sustituir la lógica de la competencia por otra de colaboración. Así lo han afirmado las emprendedoras que han participado en el VIII Workshop de la Mujer Emprendedora, que anualmente organiza la Cátedra de Creación de Empresas y Empresa Familiar de la Universitat , en colaboración con el Club de Emprendedores de esta universidad. 

Fecha: jueves, 15 de diciembre de 2022 a las 19:30h

Las emprendedoras enarbolan el espíritu de colaboración

El emprendimiento impulsado por las mujeres tiene ante sí el reto de sustituir la lógica de la competencia por otra de colaboración. Así lo han afirmado las emprendedoras que han participado en el VIII Workshop de la Mujer Emprendedora, que anualmente organiza la Cátedra de Creación de Empresas y Empresa Familiar de la Universitat , en colaboración con el Club de Emprendedores de esta universidad. 

Helena Sánchez, la más joven de las emprendedoras participantes, ha asegurado que, en ocasiones, se ha “encontrado con otras mujeres que, en lugar de verte como una colaboradora te ven como una competidora”. Sánchez cree que debería ser al contrario: “es importante que los emprendedores nos veamos como compañeros porque en el mundo del emprendimiento siempre pueden surgir oportunidades”. 

En la mesa redonda, que ha sido moderada por el fundador de Girona Tech Hub y CEO WOW Startups, Joe Esparraguera, cuatro emprendedoras han compartido su experiencia en la puesta en marcha de proyectos de emprendimiento. Además de Helena Sánchez, han intervenido la consultora de hostelería Vikki Benito, la consultora de proyectos y coach Susana Martín, y la CEO de AKUABA, Núria Gil

En sus intervenciones, no han rehuido de la cuestión de si el mundo de la empresa es todavía un ámbito dominado por patrones masculinos. “Hay empresas dirigidas por hombres en las que es difícil crecer”, ha comentado Benito. Mientras que Gil, la emprendedora de más larga trayectoria de las que había en la mesa, ha recordado los tiempos en los que “se hacían preguntas en las entrevistas de trabajo que hoy serían motivo de denuncia”. 

Con todo, los desafíos a los que han de enfrentarse las mujeres son los mismos que los de cualquier emprendedor: “miedo a la incertidumbre” y la “dificultad de cuantificar el trabajo para poderlo vender”, ha señalado Martín. Algo en lo que ha coincidido Gil: “lo que más me costó es aprender a venderme a mi misma”. 

Las emprendedoras enarbolan el espíritu de colaboración